¿Por qué las apuestas de Kiteboarding son tan populares?
En el escenario digital de predicciones deportivas, el kitesurf se posiciona como una de las propuestas más interesantes. Con la creciente popularidad de los deportes acuáticos y extremos, esta disciplina ha llamado la atención de usuarios que buscan una combinación entre adrenalina y grandes oportunidades para ganar con pronósticos.
¡Acompáñanos en este viaje marítimo! En las siguientes líneas, exploramos el mundo de las apuestas en Kiteboarding, describiendo sus características únicas, la razón de su creciente popularidad, las plataformas para apostar más destacadas y mucho más.
1. Qué es el Kiteboarding
Conocido como kitesurfing, es una disciplina acuática donde el deportista se desliza en una tabla impulsado por una cometa de tracción. El kitesurfista maneja esta cometa mediante cuatro o cinco líneas: dos sirven para orientar la dirección y las otras, unidas a la barra central, regulan la potencia y están ancladas al deportista a través de un arnés.
Así pues, el equipo básico del kitesurf incluye:
● Cometa
● Barra controladora
● Arnés adaptado para la actividad
● Tabla
● 4 o 5 líneas de conexión con la cometa
● Cordón de seguridad
● Leash preventivo
● Inflador, puede ser manual o automático
En cuanto a las apuestas de Kiteboarding, dan la posibilidad de anticipar a los kitsurfistas que demostrarán mayor habilidad para ganar en diferentes condiciones marinas. La dinámica impredecible del deporte da un plus a la emoción, ya que los cambios del viento, olas y técnica del rider tienen un papel crucial en los resultados de las competencias.
2. Los 5 mejores spots para practicar Kiteboarding
¡Entérate de los grandes lugares para el kitesurf! Según la página oficial de Redbull, uno de los principales patrocinadores de competencias de kiteboarding, estos son los cinco mejores destinos del mundo para los amantes de este deporte:
2.1 Maui, Hawaii (Estados Unidos)
La mejor fecha realmente es todo el año, los que buscan fuertes vientos tienen que ir de marzo a octubre, mientras que los interesados en grandes olas se les recomienda visitar entre el resto de meses.
Con sus vientos consistentes y sus impresionantes paisajes, Maui es un paraíso para los kiteboarders. Las playas de este lugar ofrecen las condiciones ideales para novatos y profesionales por igual.
2.2 Tarifa, Cádiz (España)
Ubicada en el sur del territorio español, Tarifa es muy conocida como la capital en el “Viejo Continente” del kitesurf. Con más de 300 días de sol radiante al año, es un destino predilecto para los buscan desafiar las mareas del Atlántico.
Entre abril - junio y septiembre - noviembre son los meses de menor público en la playa, convirtiéndose en periodos ideales para tener un ambiente tranquilo, pudiendo disfrutar de un paisaje marítimo más sereno, con menos multitudes y la mejor comida.
2.3 La Ventana, Baja California (México)
Para los que están comenzando en el deporte, las mañanas y las tardes en La Ventana son ideales, ya que el viento suele ser más suave. No obstante, para los más experimentados, el viento incrementa su intensidad al mediodía, dando un mayor desafío.
Más allá del kiteboarding, La Ventana también da un encanto local a través de su pueblito de pescadores. Aquí, los visitantes pueden degustar delicias culinarias de la región mientras disfrutan de una inigualable puesta de sol. ¡Sin duda, una vivencia que combina deporte, naturaleza y cultura en un solo lugar!
3. Los mejores Sitios de apuestas de Kiteboarding en Perú
Si estás en la búsqueda de las plataformas para apuestas de Kiteboarding de primera clase esta es la sección ideal para ti. Entendemos que lo mejor cambia de un usuario a otro, pero estamos aquí para mostrarte la opción que te dará grandes posibilidades de éxito.
Queremos comentar que nuestra selección de casas de apuestas de Kiteboarding en Perú está liderada por Betsson, Betway e Inkabet. Estas plataformas destacas no solo por otorgar cuotas competitivas, sino también por ofrecer una gran variedad de métodos de pago como Yape y bonificaciones únicas para los usuarios.
Con un enfoque detallado, señalamos estos operadores de máxima calidad en el ámbito del kitesurf. Si deseas obtener más información sobre apuestas con yape, te invitamos a visitar nuestro sitio oficial.
4. Tipos de apuestas de Kiteboarding
Apostar en competencias de kitesurf permite a los aficionados de este deporte conectar más profundamente con el evento, viviendo cada salto y maniobra con una intensidad adicional. De inmediato, presentamos algunos mercados de predicción que podrías encontrar en el Kiteboarding:
● Ganador del Evento: Los usuarios predicen qué competidor se llevará a casa el trofeo del torneo en cuestión. Los pronósticos aquí se basan en el rendimiento previo, habilidades técnicas y adaptabilidad del rider.
● Mejor Maniobra: Esta categoría siempre es emocionante, ya que reconoce a las hazañas más impresionantes realizadas durante la competición. Los pronósticos se centran en cuál será la maniobra que destaca por su dificultad y ejecución.
● Distancia Máxima de Salto: En este mercado, los usuarios predicen cuál kitesurfista logrará el salto más largo en términos de distancia. Factores como las condiciones del viento, equipo utilizado y técnica del rider son claves para tomar una decisión informada.
Estos son solo algunos ejemplos de las múltiples categorías de apuestas de Kiteboarding. Al igual que con otros deportes, las posibilidades son amplias y la pasión crece con cada competencia.
¿Por qué las apuestas de Kiteboarding son tan populares?
En el escenario digital de predicciones deportivas, el kitesurf se posiciona como una de las propuestas más interesantes. Con la creciente popularidad de los deportes acuáticos y extremos, esta disciplina ha llamado la atención de usuarios que buscan una combinación entre adrenalina y grandes oportunidades para ganar con pronósticos.
Ramiro Pinilla no hace surf
Nació hace 100 años y no hace surf, ni hizo, pero era un amante de su pueblo (Getxo) y del mar.
Como pequeño homenaje a este reconocido escritor vasco reproduzco un pequeño relato aparecido en la revista Galea en julio de 1984 en el que recordaba cómo eran las playas entonces. Curiosamente, el relato continua teniendo , en algunos aspectos, una inquietante actualidad.
Nuestras playas (1984)
Imaginaos lo mejor: pues así eran nuestras playas hace medio siglo. Eran como fragmentos de un mundo acabado de estrenar. Y, sobre todo , en las grandes bajamares -cuando se nos ofrecían a la vista territorios nunca vistos - se tenía la sensación de estar ultrajando un planeta reservado a especies más afortunadas. Eran incursiones hacia lo desconocido, con to dos los atributos de la gran aventura: virginidad..., ¿nos arrepentiríamos alguna vez de mancillar aquella pureza húmeda recién desnudada?; soledad..., ¿acaso la huida de los otros humanos que nos acompañaban obedecía a que una iniciación así era privilegio de un solo elegido?; silencio ..., ¿sería así el prometido fondo del mar?; misterio..., ¿qué secreto de vida ocultaban la ondulante vegetación de los remansos y las enigmáticas aguas de bajo las peñas?
Dudo que sensaciones semejantes experimenten sus infortunados visitantes de hoy.
Además, si nos referimos, por ejemplo, al año 37, recién "liberado " Getxo , nuestro encuentro con ese paraíso virginal se producía rescatados ó lo fugazmente, sólo mientras permaneciéramos en las prodigiosas peñas de la bajamar- de una torpe, rancia y eclesial represión de la carne: garantizaban nuestra entrada en el cielo guardas de playa, municipales y Guardia Civil, en benéfica acción conjunta contra la simple exhibición de un solo centímetro cuadrado de carne infantil de varón, siempre inclinada a los torpes placeres animales, como es bien sabido. Los niños de aquel tiempo, por si aún ignorábamos que nuestro esqueleto estaba forrado de varios kilos de carne puesta por el diablo, lo descubríamos al advertir la santa saña con que se nos perseguía. Nos contemplábamos por debajo de nuestra cerrada ropa, en parte orgullosos de poseer semejante tesoro insospechado, en parte avergonzados de cargar, desde tan jovencitos, con tan peligroso material. Nuestro bañador había de tener peto, tela por arriba para cubrir nuestros incitantes pechos de doce, diez y seis años, y aún menos, pues no se libraban ni los nenes gorditos. Si el pantalón carecía de faldita, ésta debía sustituirse por la toalla: no se nos permitía permanecer fuera del agua sin la toalla, y, al ir al baño, debíamos llevarla puesta hasta la mismísima orilla y desaparecer pronto en las olas. Estaba prohibido tumbarse en la arena —postura erótica justamente perseguida- sin albornoz, de modo que, quien careciera de él, se veía condenado a estar de pie o a sentarse con peto y toalla . La carne de los niños se cotizaba tanto como la de las niñas, cosa que, ya de mayores, nos llenó de vanidad e hizo que mirásemos a las chicas de igual a igual.
Nos defendíamos del enemigo organizándonos estratégicamente. Toda la playa era un solo hombre contra nuestros opresores. Adultos y adultas, niñas y niños, nativos y veraneantes, añas y el vendedor de patatas fritas montábamos un servicio de centinelas escalonados de punta a punta. Asombrosamente, y aunque cumplían órdenes directas de Dios, los guardas no eran ubicuos y habían de desplazarse con pies terrestres de un extremo al otro de la playa, circunstancia que aprovechábamos para pecar cuando ellos se alejaban de nuestra zona. Pero no duraba mucho nuestra dicha: no tardaba en oírse la alarma en cadena: "¡Que vienen!", " iYa están adentro!", "Han puesto cinco multas en Cobo !", y cada zona cambiante volvía a ser una reserva espiritual de Occidente. Tanto ingenio desarrollado hizo de nosotros una generación muy lista, como se puede advertir actualmente.
Un hombre joven, un providencial humorista, nos vengó. De pronto, una mañana de sol fulgurante, apareció en las ardientes arenas una figura tiesa to d a vestida de frac, chistera, botines y bastón con mango de nácar. Sólo llevaba al aire la cara, mu y seria. Y así se metió al agua, entre la carcajada general. A l salir, los guardias se lo llevaron. Se dijo que le impusieron una multa de 5 00 pesetas... ¡de entonces!
Las pescas eran apoteósicas en aquella dichosa edad. En las limpias bajamares, pescábamos pulpos, eskarras, sabayos, centollos, quisquillas y quisquillones, cabrachos, julias, sarrones... Las peñas eran como un gran vivero a nuestra disposición. Los mejores pescadores eran, claro, los aborígenes, a los que ni en invierno se tes quitaba el moreno de la piel. Todos los veraneantes perseguíamos a los aborígenes por las peñas: donde ellos estuviesen había pesca. Pero eran dioses superiores en su escenario natural y habíamos de contentarnos con sus sobras. Hoy , en 1984 , se ha perdido aquella raza -¿ dónde están los Uribe, los Montan o, los Sópela, los Jáuregui, los Aguiriano?, y , si están, aún, ¿qué ha sido de ellos ? -, ya no hay diferencia entre aborigen y advenedizo urbano. Y la ausencia de aborígenes selváticos significa, ay, que nuestras playas, nuestro Getxo, han perdido " lo natural", y para siempre, para siempre... Agur, agur.
Conoce la élite del surfing con los campeonatos más importantes del mundo
Fuente: pexels.com |
El surf, en su esencia, es un diálogo entre el ser humano y la naturaleza. La emoción de deslizarse sobre las olas y la habilidad de navegar a través de la energía del océano han dado lugar a una cultura global apasionada y vibrante.
En el corazón de esta se encuentran los campeonatos de surf más importantes del mundo, eventos que se han vuelto pioneros dentro de los casinos online de apuestas y que reúnen a los surfistas más talentosos y audaces para competir en las olas más desafiantes del planeta. A continuación, exploraremos en detalle estos emocionantes y prestigiosos campeonatos.
1. Campeonato Mundial de Surf de la World Surf League
La World Surf League (WSL) es la autoridad máxima en el mundo del surf profesional, y su Campeonato Mundial de Surf es el torneo más codiciado. Este se desarrolla a lo largo de múltiples etapas en distintos destinos, cada uno con sus propias características y desafíos. Desde las olas tubulares de Teahupo'o hasta las imponentes de Pipeline y las líneas perfectas de J-Bay, los surfistas de la WSL enfrentan una variedad de condiciones que ponen a prueba su versatilidad y destreza. La lucha por el título mundial es una odisea llena de emociones, donde se compite no solo entre sí, sino también contra los elementos.
2. Quiksilver Pro y Roxy Pro Gold Coast
La temporada de la WSL se inicia en Gold Coast, Australia, con el Quiksilver Pro y el Roxy Pro Gold Coast. A través de estos eventos los aficionados obtienen buenos pronósticos para las competiciones del resto de la temporada. Pero no solo marcan el comienzo del año competitivo, sino que también establecen el ritmo y la emoción que caracterizan al surf de élite. Las playas de Gold Coast ofrecen olas consistentes y desafiantes que exigen lo mejor de los surfistas. Los atletas tienen la oportunidad de mostrar su creatividad y habilidades técnicas en un ambiente lleno de entusiasmo y energía.
3. Billabong Pipe Masters
El Billabong Pipe Masters es sinónimo de audacia y valentía en el mundo del surf. Celebrado en Banzai Pipeline en Oahu, Hawái, este campeonato es conocido por sus olas masivas e impresionantes. Pipeline es un lugar sagrado para los surfistas y representa uno de los desafíos más formidables del deporte. Aquí, los competidores se enfrentan a tubos que pueden trascender lo épico.
4. Margaret River Pro
En el oeste de Australia, el Margaret River Pro ofrece un escenario completamente diferente. Aquí, las olas poderosas del océano Índico desafían a los surfistas con su tamaño y fuerza. La versatilidad es clave en este campeonato, ya que los surfistas deben ser capaces de adaptarse a diferentes tipos de olas y condiciones. Más allá de la competencia, el Margaret River Pro resalta la impresionante belleza natural de la región.
5. Tahiti Pro Teahupo'o
El Tahiti Pro Teahupo'o es una muestra de la alianza entre los atletas y la naturaleza. Teahupo'o, en Tahití, es famosa por sus poderos olas que rompen sobre arrecifes de coral afilados. Los surfistas se enfrentan un desafío sin igual, donde la valentía y la técnica son igualmente importantes. Este evento es una exhibición de la conexión íntima entre los surfistas y el océano, donde la pasión y el riesgo convergen.
6. J-Bay Open
El J-Bay Open, en Jeffrey's Bay, Sudáfrica, es un escaparate de la belleza y la perfección de las olas. Las largas y rápidas olas de J-Bay ofrecen a los surfistas la oportunidad de realizar maniobras elegantes y fluidas. Cada ola es como una hoja en blanco en la que los surfistas pintan su creatividad y estilo personal. Este evento ha dejado una marca duradera en el surf y ha influido en la evolución de la técnica y el arte de surfear.
Los campeonatos de surf más importantes del mundo son más que competiciones deportivas; son celebraciones de la pasión, el coraje y la dedicación que definen a la comunidad global del surf. Cada evento tiene su propio carácter y desafíos únicos, pero todos comparten una conexión profunda con la naturaleza y la búsqueda constante de superación personal. A medida que los surfistas se deslizan sobre las olas y desafían los límites de lo posible, estos eventos continúan inspirando a personas de todas partes a abrazar este deporte y a apreciar la magia de la interacción humana con el océano.
Trouble : La historia de Lisa Andersen
Pero para lograr el éxito tuvo que luchar muy duro. Nacida en Nueva York y criada en Florida, su primer contacto con el surf no fue fácil. Sus padres querían mantenerla alejada de ese mundo que, según ellos, estaba lleno de peligros.
Las largas sesiones de surfing hicieron mella en su rendimiento escolar y con el paso del tiempo se convirtieron en un problema para sus padres, tanto que finalmente Lisa, con apenas 16 años, se escapó de casa en dirección a Huntintgton Beach en busca del sueño de ser la mejor surfista del mundo.
No tardó demasiado en ganar su primer campeonato, el US Championship en aguas de Sebastian Inlet, se conviertió en profesional, pero todavía le faltaba la regularidad necesaria para llegar a lo más alto.
En aquella época comenzó su relación con Renato Hickel. Si, es el mismo que véis en las etapas del CT, el director general del World Tour de la WSL. En aquella época era el jefe de jueces de la ASP, y debido a su relación dejó de juzgar en las pruebas femeninas.
En 1993, tuvo su primera hija, fruto de esta relación, y todavía seguía compitiendo. El hecho de ser tan joven, ser madre en aquella época, y viajar por todo el mundo junto a su bebé, proporcionaron una pizca más de épica a su historia.
Un año después, Andersen conseguía su primer título mundial, título que le valió su fichaje por Roxy, marca creada en 1990. Con un sponsor tan potente, Lisa consiguió sus mayores éxitos, cuatro campeonatos mundiales consecutivos (94, 95, 96 y 97) y pasar a ser un mito en el surfing en general y en el femenio en particular.
Para la historia queda también ser la promotora de los primeros pantalones cortos para mujeres en el surfing.
Una lesión en la espalda la alejó del surfing a mitad de la temporada del año 98, momento en la que la autraliana Layne Beachley comenzó a dominar el surfing mundial, consiguiendo 7 títulos muniales. En 2002, volvió a la competición pero ya no fue igual, retirándose poco después.
¿Por qué los rescatadores a menudo mueren tratando de salvar a sus familiares?
Leo en The Guardian un interesante artículo que se hace eco de una racha de ahogamientos ocurridos en las costas de Australia durante las últimos días en pleno verano austral, todos ellos protagonizados por personas que intentaban rescatar a un familiar y mueren en el intento.
El artículo intenta explicar por qué sucede esto e indica algunas pautas para intentar que esto no suceda.
Fueron al menos dos australianos y un neozelandés los que se ahogaron en una semana este verano austral mientras intentaban salvar a un familiar.
Los expertos dicen que es un número alarmante, en comparación con la media de seis anuales, y las causas de tales incidentes son trágicamente familiares.
Este fue el caso del oficial de policía fuera de servicio, el sargento Peter Stone, de 45 años, quien se ahogó el lunes mientras intentaba rescatar a su hijo de 14 años en una playa al sur de Narooma, Nueva Gales del Sur.
Stone logró empujar a su hijo a un lugar seguro, pero no sobrevivió, a pesar de los esfuerzos de los salvavidas que realizaron la reanimación cardiopulmonar.
El martes, otro hombre, de 42 años, murió después de intentar rescatar a su hija adolescente de una corriente en Black Head, 75 km al sur de Port Macquarie.
Un surfista consiguió llevar a la niña a la orilla y regresó para traer al hombre de regreso a la playa. Los transeúntes realizaron RCP hasta que llegaron los paramédicos, pero no pudieron revivirlo.
El jueves, una mujer de Nueva Zelanda, de 52 años, se ahogó mientras intentaba salvar a su hija de 11 años de una fuerte corriente de laguna en las Islas Cook.
Y en la península de Mornington de Victoria el viernes por la noche, un hombre de 20 años y su hermano de 16 tuvieron problemas para nadar en la playa de Gunnamatta.
Al ver que estaban luchando con fuertes olas y fuertes vientos, el padre de los niños nadó para ayudarlos. Los servicios de emergencia rescataron al padre y a su hijo menor, pero el hijo mayor no ha sido encontrado, a pesar de una extensa búsqueda hasta el sábado.
Peden dice que los ahogamientos de personas a menudo involucran a un padre que intenta ayudar a un niño.
“A menudo es un padre que va a rescatar a un niño o a alguien que conoce, en lugar de un extraño”, dice ella.
Según sus datos, los australianos realizarán un rescate en su vida, por lo que es vital saber cómo manejar la situación.
Peden dice que "algunas cosas diferentes pueden salir mal" para poner al rescatista en una situación insegura, pero por lo general simplemente se agotan.
La adrenalina desaparece, el agotamiento aparece, el esfuerzo que se necesita para llegar a alguien, para asegurarse de que esté bien y mantenerlo a flote, el esfuerzo de eso, con la gente agarrándote, es demasiado.
Peden dice que es natural que los padres no lo piensen dos veces antes de entrar al agua para tratar de rescatar a un niño "en el calor del momento", pero pensarlo dos veces puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
La primera posibilidad es simplemente pedir ayuda si hay otras personas cerca. Después, de manera crucial, si uno entra solo en el agua, "lleva algo que flote: una tabla de boogie, un flotador de piscina, ua tabla de surf, es posible que tengan una botella de dos litros de agua o algo así, cualquier cosa que pueda contener aire".
“Necesitarás esa flotación cuando realices el rescate”.
El profesor Rob Brander de la UNSW, conocido como Dr. Rip por su investigación sobre el uso de tintes en las olas para enseñar cómo funcionan las corrientes, se hace eco de ese consejo.
“Hemos realizado encuestas de personas involucradas en rescates de personas y observando las muertes, el tema principal que surgió es que las personas no llevaron un dispositivo de flotación. Los que lo hicieron, consiguieron sobrevivir”.
Ambos investigadores enfatizan que las precauciones y cierto conocimiento de la playa son una salvaguardia esencial contra los ahogamientos. Los dos casos de la semana pasada ocurrieron en playas no vigiladas e involucraron corrientes, dice Peden.
"Saber cómo detectar una corriente es importante y elegir nadar en un lugar controlado; no será un bañista sin entrenamiento el que vaya al rescate si hay un socorrista entrenado".
Brander dice que detectar una corriente puede ser difícil, pero es esencial para salvar vidas.
“Tienen diferentes tipos de características visuales, pero las corrientes más comunes son más fáciles de detectar”, dijo Brander.
“Se asientan en canales profundos, el agua es más profunda y oscura y no rompen tantas olas allí. Si estás mirando a lo largo de la playa, aparecerán como estrechos senderos verdes que se dirigen mar adentro entre las aguas blancas”.
Él dice que si alguien queda atrapado en una corriente, lo mejor que puede hacer es flotar: la corriente finalmente terminará y podrán nadar de regreso. Pero con el agotamiento adicional de tratar de ayudar a una segunda persona, el instinto de luchar contra la corriente puede ser fatal.
“Cuando las personas se atascan en las corrientes, pierden el equilibrio... la reacción inicial de la mayoría de las personas es nadar de regreso, pero se cansan y entran en pánico”, dice.
Durante los últimos 10 años, un promedio de 26 personas cada año han muerto en Australia porque no sabían qué hacer en caso de corrientes, pero Brander dice que es probable que el número sea mucho mayor.
"Probablemente estés viendo a 30 personas cada año; eso es más que las personas que han muerto por inundaciones o tiburones, es un gran peligro".
Todas las inocentadas en la historia de Surf 30
Ya son 17 los años que ha cumplido Surf 30, a falta ya solo de uno para la mayoría de edad. Repasamos todas las inocentadas en su historia.
Ha habido buenas, malas, y regulares. Algunas me cazaron nada más publicarla, otras se tardó más, pero todas tenían el mismo objetivo: pasar un buen rato.
2006 - Remontes hasta el pico en las playas de Sope
Nos hacíamos eco de la instalación de un telesilla en La Salvaje que podría cogerse tanto desde el acantilado para los surfistas que van a meterse al agua, como desde la misma orilla de la play, la voladura de Peñatxuri, una serie de rocas que han provocado durante años multitud de accidentes entre los surfistas locales y foráneos.
2007 - Aparece un tiburón blanco en Sope
Un tiburón blanco de 12 metros de largo aparece en la orilla en pleno mes de diciembre.
2009 - Se pone en marcha el carné por puntos para surfistas
A los federados se les entregaría un carné con 12 puntos (al igual que el de conducir) que les permitirá surfear en cualquier playa de Euskadi mientras que a los nuevos surfistas se iba a exigir un curso en alguna de las escuelas de surf homologadas que hay con todo el País Vasco para hacerles entrega de dicho carné.
2010 - El Kelly Slater Surf Txoko
La Diputación de Bizkaia proyecta construir una piscina de olas en el polideportivo de Pinosolo, en Leioa, Bizkaia, gracias al acuerdo alcanzado con la compañía The Kelly Slater Wave Company.
2011 - A la caza de surfistas parados
¿Cómo es posible que haya tanto surfista a las mañanas? "No es posible que estén buscando empleo activamente y en la playa a la vez". El Gobierno Vasco se pone manos a la obra y buscará a los surfistas que están obteniendo ayudas de las administraciones para saber si están buscando trabajo realmente.
2012 - Las tablas de surf son embarcaciones de recreo
Tablas de surf, tablas de windsurf, kitesurf, piraguas, etc., se considerarán como embarcaciones de recreo, y por tanto deberán cumplir con las estrictas normas con las que se rigen, así como el pago de tasas, impuestos, y la posesión de un seguro obligatorio-
2013 - La ASP anula el título mundial a Fanning
Los jueces el ASP reconocieron haber inflado la puntuación de la última ola del australiano que le daba el título mundial. Dos jueces reconocieron haber realizado esto por simple despecho hacia Kelly Slater, de quién dijeron que "aburría ya con tantos títulos mundiales" , que "no necesitaba ganar más", y que "debería retirarse y dejar paso al resto"
2014 - Invitan a Tom Curren a participar en el CT 2015
El ex campeón del mundo iba a surfear a sus 50 años en el CT, acompañado de Martin Potter, Tom Carroll, Rob Machado, y Sunny Garcia.
2015 / 2005 - Sacan al mercado un invento inalámbrico
Originariamente publicada en 2005, la reutilicé diez años más tarde. Es seguramente la que más cariño que tengo. Se trataba de un sistema basado en una serie de pequeños pero potentes electroimanes que se activan cuando se percibe que un extremo está a más de dos metros de distancia haciendo que vuelvan a unirse. La noticia se la tragaron varios medios que la copiaron y pegaron en sus webs y estuvo activa durante meses.
2016 - Creada la primera iglesia Slateriana
Así consideran a Kelly Slater como la encarnación de Dios en los mares, y a Gerry Lopez y Tom Curren como algunos de sus apóstoles. "El surfing que practica Slater no está al alcance de cualquier otro ser humano, es algo divino".
2017 - Gabriel Medina se pasa al futbol
Un Medina sobrado sigue los pasos de Michael Jordan, dejando el deporte que más galardones le ha dado para fichar por el Santos.
2018 - La RAE hace un guiño al surf
Esta vez la Real Academia de la lengua Española admitía en su diccionario palabras como espumón (muro de espuma que arrastran las olas grandes al romper), surfari (viaje con el único objetivo de surfear olas), raca y flaca (en el surf giro brusco de un surfista que normalmente levanta gran cantidad de agua de una ola), chirivuelta, y sifonazo (cortina de agua liberada por el tubo de la ola al cerrarse).
2019 - España contará con una ola de Kelly Slater en 2022
Repito con alguna variante la inocentada de 2010 para anunciar que Slater iba a montar una ola artificial en un secarral en los Monegros.
2020 - Descubiertos en Bizkaia los primeros indicios del surf de la historia
Bizkaia se vuelve a convertir en el centro del universo al anunciarse que el surf se inventó allí.
2021 - El COVID obliga a nuevas restricciones para los surfistas
En plena ola de Covid, el Gobierno prohibe la concentración de más de diez surfistas en la misma ola.
2022 - Cierran la ola de Kelly Slater
La crisis energética obliga al cierre de la ola de Slater en California. Caen varios medios internacionales del sector del surf en la inocentada y el WSL me llama la atención y me pide que borre la noticia.
Cómo eliminar el mal olor de tus escarpines
Los escarpines son difíciles de secar totalmente y ya sabemos que la humedad atrae a las bacterias, que son las causantes de este olor pestilente.
Uses lo que uses se trata de eliminar esas bacterias, ya sea cambiando el PH, o matándolas directamente.
Hay productos profesionales para eliminar estos olores, como Mirazyme, que puedes comprarlo por menos de 15 euros y te asegura una solución. Lo he probado y funciona.
Otras forma es remojar los escarpines en agua templada con un poco de gel de baño y unas gotitas de lejía o un pequeño chorro de vinagre, y dejarlo durante una hora. Luego aclarar bien y dejarlos secar, siempre boca abajo para que puedan escurrir bien.
Estas medidas deberían ser suficientes para atajar el problema y volver a disfrutar de unos chapos sin olores.
Más frío y menos olas
Ayer tuviemos la oportunidad de volver otra vez a las playas más abiertas al mar para un baño en general con olas flojas y poca fuerza.
Un mar totalmente anortado que sumado a los fondos irregulares que han quedado después de las últimas marejadas y a la retirada del swell no ofreció mucho que rascar.
Aún así, buscando el lugar y el puntito de marea adecuado algunas olas divertidas se pudieron coger en una tarde fría y despejada.
Para hoy se espera más frío y menos olas. El mar quedará prácticamente plato o con olas muy pequeñas, situación que continuará hasta mañana viernes, cuando empiece a subir ligeramente.
Un prometedor fin de semana
Finaliza una semana pasada por agua, en la que apenas hemos visto la luz del sol, pero lo hace con vientos de tierra y unas previsiones de olas bastante buenas.
Cierto es que pese al viento y a la lluvia hemos tenido algún baño bastante decente en lugares bastante conocidos, pero en general, con condiciones tan complicadas ha sido difícil encontrarlo.
Hoy será el último día de borrasca, de vientos del noroeste. A partir de mañana y durante por lo menos una semana, el viento no será impedimento para surfear.
El sábado tendremos olas de tres cuartos de metro a la mañana, con vientos flojos del sur y un aumento notable de las temperaturas. Es decir, vuelve el otoño.
A partir del mediodía la fuerza del mar irá subiendo progresivamente hasta el metro y medio o dos metros con algo de viento variable, pero en principio nada molesto.
Y ya para el domingo tendremos dos metros bien puestos, con periodos cercanos a lso 12 o 13 segundos, y vientos flojos durante todo el día.
Feliz fin de semana.
Cylinders: la hermana de derechas de The Wedge
Para la mayoría de nosotros The Wedge es la ola más conocida de Newport Beach, California, pero hay otra ola muy pegadita a esta, tan violenta como la primera, pero mucho menos conocida: Cylinders.
The Wedge es la ola que mira hacia la izquierda desde el embarcadero en Newport Beach y justo al norte de ese pico principal está Cylinders, que mira hacia la derecha. Por lo general, está lleno de fotógrafos y surfistas que no están tratando de lidiar con la multitud del pico principal.
Es una derecha más fina, más redonda, y menos contundente que su hermano mayor.
¡Vuelven las olas!
Después de semanas con olas pequeñas, e incluso sin ellas, por fin llegan varias marejadas seguidas.
Ayer se dejó notar ligeramente, sobre todo a última hora. Antes las olas revueltas por el viento del norte cercanas a los 3/4 de metro dejaron algún momento divertido para lo que había.
Pero lo bueno viene a partir de hoy, con olas cercanas al metro y medio, viento flojo a la mañana, que luego rolará a noroeste y seguirá soplando en la misma dirección durante un par de días.
Será a partir del viernes y durante cinco días cuando mejores condiciones para el surfing haya. Olas por encima del metro de altura, periodos majos, y vientos en general favorables.
Y es que pocas veces la segunda quincena de agosto defrauda. Crucemos los dedos.
El ojo de surfista
La exposición continuada al sol y al agua de mar provoca una irritación en la superficie ocular, la cual se manifiesta como fotofobia, enrojecimiento ocular, picor o lagrimeo. En general, con el uso de lágrimas artificiales y de una buena prevención, mediante gafas de sol, los síntomas de irritación suelen ser menores o no aparecer. Pero aquellas personas que se exponen durante muchas horas al agua salada y el sol sin la protección adecuada, como por ejemplo agricultores, marineros, surfistas, etc. le pueden aparecer complicaciones a lo largo de los años, como enfermedades. Aquí es donde trataré la enfermedad denominada pterigion.
Las consecuencias de esta enfermedad pueden ser un abultamiento en el ojo, ardor en el ojo, sensación de tener un cuerpo extraño en el ojo, y lagrimeo. En los casos más graves el pterigion puede afectar a la visión, porque invade la córnea con el potencial de oscurecer el centro óptico, e inducir astigmatismo y cicatrización corneal. En último lugar, puede producir visión borrosa.
Cuando la lesión causa malestar persistente o interfiere con la visión, se solucionar mediante una operación quirúrgica que suele durar entre 20 y 45 minutos. Luego se deberá llevar una venda pegada al ojo durante uno o dos días.
De todas formas, la mejor forma de evitarlo es con la prevención. Usar gafas de sol que bloqueen el 99 o 100% de los rayos ultravioleta A (UVA) y ultravioleta B (UVB), incluso en días nublados, es la mejor forma de prevenir. Usar gorro y lágrimas artificiales para mantener los ojos húmedos, son otras formas de prevenir la aparición del ojo de surfista.
Laura Cardenas, una estudiante en su último curso de medicina, está buscando casos de esta enfermedad en España, algo al parecer no muy habitual o diagnosticado. Si habéis tenido esta enfermedad podéis comentarlo o escribirme a mi directamente y se lo renvío a ella.
Surf y ambición: la bella y la bestia
Surf y ambición: la bella y la bestia
Por Iñigo UrdinagaHemingway amaba profundamente la mar (así, en femenino), pero las olas las disfrutaba como los toros, ya saben, desde la barrera. Y así, mientras el americano acompañaba a un equipo de Hollywood en busca de localizaciones para el rodaje de The Sun Also Rises (Fiesta), alguien sacó una tabla, se tiró al agua y se incorporó sobre las olas de Biarritz. Aquella mañana de 1956 fue la primera en la que un ser humano se deslizaba de pie sobre el Cantábrico. No han pasado tantas mareas desde entonces, pero los cambios han sido vertiginosos para un pasatiempo que nació en alguna remota isla polinesia y llegó hasta nuestra costa desde California. En el siglo XXI, el surf parece haber sido asimilado por la cultura del dinero; otra máquina más de crear postales pop.
Antes de seguir recordemos que, en esencia, el surf es simple y llanamente un gran placer. Los indígenas hawaianos lo disfrutaron durante más de cuatro siglos antes de que llegara el capitán Cook en 1778. «Aquellos salvajes de ambos sexos parecían vivir el más supremo placer mientras la mar los conducía rápida y suavemente», escribió su teniente en el cuaderno de bitácora. El mismísimo Jack London probó el surf en Hawái con cierto éxito y lo definió como «un deporte real para los reyes naturales de la tierra». Y es que la acción de surfear siempre transmite frescura, júbilo, entendimiento con la naturaleza y, sobre todo, libertad, o sensación de libertad. Los norteamericanos lo vieron enseguida: tras apropiarse de Hawái y del surf, lo explotaron a través de Hollywood en innumerables películas, e incluso lo emplearon en la guerra fría como arma de seducción ideológica; desde películas surferas proyectadas en Moscú hasta campeonatos en países asiáticos.
Cuando llegó al Cantábrico, el surf venía de ser contracultura en la California de los sesenta; era cosa de pijos y hippies porretas que no querían hacer la mili, y menos en Vietnam. Mostraban desdén por el trabajo y poca ambición materialista, pero soñaron con la posibilidad de vivir —o sobrevivir— de su pasión. Y no serían ni los primeros ni los últimos. A finales de los sesenta, Patxi Oliden, un artesano de traineras y remos, abrió en Orio el primer taller de fabricación de tablas de surf de la Península para hacer sus Itxas Tresna (‘herramientas de mar’). La costa vasca vio nacer los primeros campeonatos, tiendas, escuelas y revistas de surf. Todo eso atrajo mucha atención mediática pero también derribó estereotipos: para hacer surf no hacía falta ser rubio, ni ser hijo de papá; las olas buenas son en invierno, los Beach Boys no surfeaban y las drogas no eran imprescindibles. Tampoco había que irse hasta Hawái para coger olas gigantes. Ibon Amatriain descubrió y estrenó olas en el golfo de Bizkaia que parecían imposibles de surfear; Eneko Acero fue el primer surfista profesional de España y Aritz Aranburu es, hasta el momento, el primer y único surfista estatal en acceder al top mundial. Y aún hay unos cuantos más.
Entre olas y surfistas surgen más marcas locales, más tiendas, más escuelas y campeonatos. Dice el escritor Eduardo Illarregui que el País Vasco, con su franja costera de apenas ciento setenta y seis kilómetros, atesora una de las mayores concentraciones por metro cuadrado de surfistas de élite, shapers (fabricantes artesanos de tablas), artistas y empresarios relacionados con la industria del surfing del planeta. En tan solo seis décadas, el surf ha calado hondo en una sociedad volcada a la mar desde antiguo. Los vascos ya convirtieron la pesca de la ballena en la primera industria en la historia de América del Norte en el siglo XVI. En los tiempos de Instagram se trata de seguir explotando la mar a través de otros medios. Eso sí, no basta con coger olas colosales o hacer maniobras increíbles. También hay que demostrar flow en internet. Los surfistas profesionales y wannabes —aquellos que pretenden serlo— trabajan su personal branding; las grandes marcas y los medios venden la postal y el postureo, y todo el mundo quiere su foto.
Durante la primera década del siglo XX, el número de personas que practicaban surf se multiplicó dos veces por dos: en 2002 se calculaba que eran unos cinco millones en todo el mundo, y en 2010 ya eran veinte millones. La masificación se ha convertido en el gran problema del surf: cuanta más gente surfea, menor es el placer. Mundaka sigue bombeando olas de clase mundial, pero cada año son menos las posibilidades de hacerse allí un buen tubo. Las olas surfeables adecuadas son ya un recurso natural limitado y todas las playas comienzan a estar saturadas de surfistas compitiendo entre sí. Hasta la mar tiene sus límites, pero no importa: las olas artificiales amenazan con convertirse en fábricas de surfers principiantes. William Finnegan, surfista y premio Pulitzer 2016 por Barbarian Days (Años salvajes), fantasea con la idea de que algún día el surf pudiera pasar de moda. «Y cuando llegue ese día, tal vez millones de novatos dejen de surfear y dejen las olas a los surfistas recalcitrantes».
Hay en el País Vasco tanto cluster de surf, tantos cursos de marketing del surf, tantas empresas especializadas en turismo surf… Algunos surfistas creen que colegas suyos están vendiendo el alma al diablo. El surf ha perdido soul, está muriendo de éxito y quizá sea necesario imponer algunos límites también a la ambición humana. Cuando todo parecía perdido, en plena desnaturalización y con la industria tratando de centrar la narrativa del surf en los campeonatos, aparece en escena un viajero de Getxo con sus tablas bajo el brazo y una cámara para grabar y contar sus aventuras. Kepa Acero es hoy uno de los exploradores de olas más renombrados del globo, al que medios norteamericanos presentan como «la versión moderna de Vasco de Gama». Con sus viajes y vídeos ha recordado a todo el mundo que no todo son maniobras espectaculares y campeonatos. La industria quiere ídolos y fans, circo y más ventas, pero la competición en el surf no deja de ser algo impostado. Matt Warshaw, autor de The History of Surfing y The Encyclopedia of Surfing, recuerda que solo el dos por ciento de los surfistas participa en campeonatos, que el noventa y mucho por ciento de las competiciones son silly entertainment, y que los mejores momentos del surf suceden casi siempre lejos de los campeonatos.
Nos disponemos a entrar en un nuevo tiempo. Si el surf era puro disfrute y divertimiento, ya nos encontramos en otra fase: llega la era del postsurf. Cori Schumacher, tres veces campeona del mundo de tabla larga, defiende la necesidad de deconstruir, redefinir y reconstruir este pasatiempo venido a más, y propone comenzar por «desplazar del centro al surfista masculino competitivo profesional». Hoy gozamos de mejores tablas y trajes, predicciones marítimas precisas, vuelos más o menos económicos, etcétera, pero, como dice la socióloga Kristin Lawler, los surfistas viven «con un profundo sentimiento de paraíso perdido». Parece que los mejores tiempos para surfear ya se fueron, y no van a volver.
Nos queda la mar. El frío y duro invierno de la costa cantábrica, con sus marejadas y vientos del sur. Y nos queda la ambición, que es también bella y bestia. Ojalá sea para recuperar el equilibrio.
Las 6 excusas más usadas al saltar una ola
No te he visto/oído. Es la más habitual y no admites culpa alguna. Ha sido una accidente inevitable. Ahí puede echar la culpa a la refracción del sol sobre el mar en ese preciso momento del día, a la curvatura del horizonte, a tu lesión de cuello, que te impide girarlo en ese sentido, a que llevas tapones para los oídos, o incluso a tu incipiente miopía, que no te ha dejado ver a nadie en esta ola, ni te dejará en sucesivas.
Hay que diferenciar dos versiones de esta excusa, la de haber mirado y no haber visto, y la más torera, en la que directamente no miras, ya sea por el ansia viva que se apodera de ti cada vez que entras al agua o porque si miras ya no puedes disculpar tu actuación.
Normalmente se suele acabar la conversación con un "la próxima para ti" que no suele consolar demasiado al saltado.
Pensabas que ibas a la izquierda/derecha. Sigue sin ser culpa tuya aunque, evidentemente, no tengas la preferencia. La culpa es de la falta de comunicación que impera en esta sociedad. Pese a que no eres un egocéntrico ni lo quieres ser, la gente sigue sin dirigirse a ti para decirte a qué lado de la ola van cada vez que reman una ola y así aclarar la situación, y eres demasiado tímido para preguntar.
Normalmente se suele acabar la conversación con un "la próxima para ti" que no suele consolar demasiado al saltado.
Foto: Noyle / Surfer Magazine |
Creía que no llegabas. Muy usada. Con esta excusa admites abiertamente que sí que le habías visto pero que no confiabas en que sus aptitudes como surfista, una especie de "este paquete no pasa esta sección ni con la firewire de Slater".
Existe la subversión de esta, aunque no se trata de una saltada propiamente dicha, que consiste en remarle la ola lo suficientemente fuerte como para romper el labio y que no pueda pasar esa sección, lo que confirma así que tenías razón, que él era un paquete y tu tenías que haber ido.
Normalmente si acabas la conversación con un "la próxima para ti" tienes que salir corriendo del agua.
Es que llevo mucho tiempo esperando. Muy usada por locales faltos de nociones matemáticas. Si me he pillado una buena hace dos minutos pero en el pico hay cuatro que no conozco y dos son alemanes con la cara más blanca que el culo de una monja, es que me toca a mí.
No importa que haya remado cinco seguidas y no me haya llevado porque uso una tabla con mucho menos volumen del que necesito para parecer mejor surfista cuando salgo del agua.
Normalmente la conversación no suele durar demasiado, a no ser que saltador y saltado tengan el mismo "rango" en el pico, y entonces se pongan a discutir durante las dos horas del baño, amargando no solo a ellos el baño si no también a todos los demás.
Ola compartida vale por dos. Admites que le has visto, que sabías a dónde iba, que llegaba, y que no te tocaba, pero apelas a su generosidad. Esta solo la puedes usar con tus amigos o de lo contrario te arriesgas a recibir un buen sopapo.
El Francheska. Aportación de un amigo. Nombre que viene de una italiana con la que estuvo en Barcelona y que hacía todas las picias del mundo conduciendo. Antes de que nadie le pitara levantaba la mano como pidiendo disculpas y ... no pitaba nadie.
Desde entonces lo usa tanto conduciendo como en el agua. Ya sabes, si te saltan una ola y a lo lejos te levantan la mano, te están haciendo una Francheska.
Foto arriba: WSL
Momentos efímeros en baños mediocres
Que haya estado feo no quiere decir que no haya habido momentos. Suelen ser efímeros, instantes que el mar da casi sin aviso. Para un poco el viento, la marea es la apropiada, y los chavalines ociosos están a otra cosa justo en ese momento. Veinte minutitos que se disfrutan antes de que el viento y los fondos te devuelvan otra vez a la realidad.
Para hoy tendremos olas pequeñas y viento del noroeste. Mejorará en viento para mañana, que no parece que vaya a soplar con tanta fuerza como días anteriores, pero el tamaño de las olas seguirá siendo muy justita, y no parece que vaya a mejorar hasta mediados de la semana que viene.
La orina y las picaduras de medusas. ¿Realidad o ficción?
Buscando por Internet he encontrado algunas respuestas contradictorias. En algunos sitios se recomienda el uso de amoniaco reducido para aliviar el dolor en este tipo de picaduras, uno de los componentes de la orina. Por tanto, la aplicación de la orina podría beneficiar en algunos casos.
De todas formas le doy más fiabilidad a la web oficial del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino que desaconseja explícitamente aplicar amoniaco, vinagre u orina. Dependiendo de la especie de medusa estos remedios caseros podrían agravar la herida y provocar que duela más.
En definitiva, en caso de picadura de medusa lo mejor que podéis hacer es ir al puesto de socorro y guardar vuestro líquido elemento.
Tratamiento de lesiones
Los primeros cuidados tras la picadura urticante con medusas van dirigidos a inactivar los cnidocitos que hayan podido quedar adheridos a la zona afectada, la extracción de restos que puedan contenerlos, mitigar el dolor y procurar la desinfección de las lesiones. Estas actuaciones pueden resumirse en los siguientes consejos:
- NO RASQUES o frotes la zona afectada, ni siquiera con una toalla o arena.
- Lava la zona con suero o agua marina, NUNCA con agua dulce.
- Quita los restos o trozos con pinzas, o si lo haces con la mano, que esté protegida.
- Para aliviar el dolor aplica frío, durante unos 15 minutos, sin frotar. Si usas hielo evita el contacto directo con la piel. Una solución fácil es utilizar bolsas de plástico con trozos de hielo en su interior.
- No apliques amoniaco, vinagre u orines.
- Los niños, personas mayores o aquellas con alergias que resulten afectados, pueden necesitar una atención especial.
- En caso de observarse síntomas como náuseas, vómitos, mareos, calambres musculares, cefaleas o malestar generalizado, acude al hospital más próximo, e informa, si es posible, del tipo de medusa que produjo la picadura.
- Desinfecta la herida con alcohol yodado 2 ó 3 veces al día durante 48 a 72 horas.
- Hay que tener presente que, normalmente, queda una herida abierta y que ésta se puede infectar. Por tanto, es necesario proteger la herida con pomadas antihistamínicas hasta que la herida cicatrice.
Os dejo el capítulo de Friends, "El de la medusa", y unos cuantos ejemplos de lluvias doradas pseudocurativas.