Anteriormente un lugar casi secreto, sólo conocido por los surfistas locales, ahora es un lugar de peregrinaje cuando esta ola rompe, algo que no sucede muy a menudo.

Esta ola rara vez rompe, pero cuando lo hace te asegura diversión, y tortazos y te arreves a pillarla junto a las rocas.

Ya vimos la semana pasada algunas imágenes de Sandpint, en Santa Barbara, California, durante la llegada de la mayor marejada en medio siglo. Si entonces el mar estaba desfasado y complicado, en esta ocasión la ola se ofrece de forma más amable.

Algunos momentos nos recuerdan a ese Sandpint épico, pero en general los surfistas tuvieron olas largas bajo el frío sol del invierno californiano.

Sandpit, esa ola que rompe raras veces en Santa Barbara, California, lo hizo durante la llegada de la mayor marejada en los últimos 50 años.

Como se ve en estos dos vídeos, esta vez las condiciones eran más grandes que buenas, con algunas olas llenas de rebotes que hacían muy complicado pillarlas.

Sucedió hace ya cinco años pero merece la pena recordar. Fue en Sandpit, Santa Barbara, una ola que solo con los grandes swells recobra la vida en la que Dane Reynols disfrutó como un niño.

Sandpit, en California, no suele romper muchas veces, pero cuando lo hace se convierte en una ola violenta y atractiva como pocas.

Ha salido hace nada este vídeo sin cortes, sin música, de una de esas mágicas y abarrotadas sesiones de hace unos cuantos años.

Curioso video con la pantalla dividida en dos horizontalmente, mostrando a gente de la talla de Tom y Frank Curren, y Kilian Garland, jugando a los tubos en Sandpit.

Cuando el océano se pone serio, en Santa Barbara vuelve a nacer Sandpit, una de las olas más singulares y bonitas de California. Si, parece facil entrar, pero muy difícil salir del tubo.

Después de las fuertes lluvias que asolaron a principios de mes California, fueron pocos los que se animaron a surfear en Sandpit, Santa Barbara, algo muy poco habitual allí.

Tom Curren, Kanoa Igarashi, y Yadin Nicol prueban una de las olas más mutantes de California, Sandpit. Gigantes contraolas, tremendas corrientes, pero si pillas una buena no la olvidas en la vida.

Continuamos en Sandpit, la maravillosa derecha de Santa Bárbara, pero esta vez a vista de pájaro para apreciar mejor la calidad de esta ola y lo petado que está el pico.

Pese a la decenas, o quizá centenares, de personas que se ven en el agua, pese a la contra ola mutante que ejecuta a cualquiera que se acerque demasiado, esta ola de Sandpit en Santa Barbara, me parece muy atractiva.