Las olas mínimas

Tormentas, aguaceros y olas enanas marcan el inicio de esta semana. Nada destacable en el horizonte para lo que nos resta de semana.

Ni sol, ni olas. La primavera se nos escapa sin que nos haya dado apenas nada. Un par de días de un metrito sin viento, pero por lo demás basura.

 

Es más sangrante que esto suceda ahora, rozando el solsticio de verano, cuando más horas de luz hay, los días en los que, de haber olas, te podrías dar dos o tres baños tranquilamente. Esos en los que te puedes pasar todo el día en la playa eligiendo el momento para entrar al agua, entre siesta y siesta. Esta vez no.

Ayer me pasé por la playa por primera vez en cuatro o cinco días, desanimado y sin ganas de rascar un baño mínimo peleándome con otros igual de desesperados que yo. Estoy en la fase de aceptación. De hecho tengo tablas que arreglar (algún toque, el grip se levanta...), pero no tengo ni ganas.

Se puede percibir para la semana que viene un ligero cambio de tendencia. Olas pequeñas, pero seguramente surfeables, incluso podría haber algo más para mediados de la semana que viene.