Un mar de posibilidades (o no)

A ojos de un surfista inexperto un mar revuelto, periodos cortos, y fuerte viento de mar, puede ser el peor escenario posible, pero para el surfista revuelto es un mar lleno de posibilidades, incalculables rampas para sus aéreos y cutbacks.

Yo no vi nada de eso último, solo la oportunidad de mojar el traje y pillar un par de olas que salvaran el baño, porque hay veces que con dos olas que pilles, si son suficientemente buenas, el baño está hecho.

El mar estaba hecho un asco, con olas llegando sin orden ni concierto de casi todos los lados, el viento soplando fuerte del noroeste... Solo se salvaba el punto de marea, y con ella, alguna ola de vez en cuando se montaba con otra para que te llevara, correr la ola, y con suerte, un pequeño giro antes de caer.

No salí del agua exultante, pero tampoco desolado, sabía dónde me metía, y más o menos, cómo iba a ser el baño, así que no me cogió de sorpresa.

Para los próximos días, empezando por hoy, el viento reimitirá, pero el problema es que también bajará el tamaño de las olas, que rondará el medio metro. Algunos partes indican una ligera subida para el la mañana del viernes, pero no irá más allá de los tres cuartos de metro. Para el resto del fin de semana prácticamente no habrá olas.