Surf, policía, y lío en Gijón
Esta es la rocambolesca historia de cómo un surfista se quiso pegar un baño en Gijón y acabó detenido por intento de atentado y lesiones a un policía portuario.
Leo en El Comercio de Asturias que la Policía Nacional detuvo a un surfista de 27 años después de que, supuestamente, intentase atropellar a un policía portuario que le quería identificar para sancionarlo por incumplir la normativa de baño. Los hechos se produjeron en el Puerto Deportivo durante el fuerte temporal que azotó la ciudad el fin de semana.
Una patrulla de la Policía portuaria se desplazó hasta la zona del Dique de Santa Catalina porque la gente se estaba saltando el cordón de seguridad que se había instalado debido al fuerte temporal.
Los policías portuarios comprobaron que una furgoneta estaba estacionada en una zona de acceso restringido, por lo que se dirigieron al vehículo para identificar a su conductor.
Allí, los dos ocupantes que se encontraban dentro explicaron que el conductor estaba haciendo surf así que fueron a buscarle. Tras varios minutos llamandole para que volviera a tierra sin éxito alguno, finalmente mandaron a una moto de agua para que le recogiese y le trasladase a los pantanales del Puerto Deportivo.
Una vez en tierra firme el surfista se dirigió a su vehículo y en ese momento los policías portuarios le informaron de que iba a ser sancionado por el estacionamiento indebido y por bañarse en zona restringida.
El joven se negó a aportarles cualquier tipo de documentación y proporcionarles sus datos personales, siendo preciso llamar a la Policía Nacional para que procediera con este trámite.
Antes de la llegada de la Policía Nacional, el conductor se subió a la furgoneta y la arrancó con intención de iniciar la marcha. Uno de los policías portuarios se situó en el lateral delantero izquierdo del vehículo y puso las manos sobre el parabrisas ordenándole que no arrancara hasta que llegasen los agentes policiales, pero lejos de obedecer sus indicaciones inició la marcha apresuradamente y, según la nota de prensa, "el policía portuario se vio obligado a saltar para evitar ser atropellado" y pese a ello, "fue golpeado fuertemente en la pierna izquierda, sufriendo lesiones en el pie".
Después de la huida, y con la sabiendo la matrícula, Policía Judicial procedió a identificar al denunciado y detenerle como supuesto autor de un delito de atentado y de lesiones. El arrestado fue puesto en libertad tras ser prestársele declaración.
Y es que cuando las cosas se cruzan...
Leo en El Comercio de Asturias que la Policía Nacional detuvo a un surfista de 27 años después de que, supuestamente, intentase atropellar a un policía portuario que le quería identificar para sancionarlo por incumplir la normativa de baño. Los hechos se produjeron en el Puerto Deportivo durante el fuerte temporal que azotó la ciudad el fin de semana.
Una patrulla de la Policía portuaria se desplazó hasta la zona del Dique de Santa Catalina porque la gente se estaba saltando el cordón de seguridad que se había instalado debido al fuerte temporal.
Los policías portuarios comprobaron que una furgoneta estaba estacionada en una zona de acceso restringido, por lo que se dirigieron al vehículo para identificar a su conductor.
Allí, los dos ocupantes que se encontraban dentro explicaron que el conductor estaba haciendo surf así que fueron a buscarle. Tras varios minutos llamandole para que volviera a tierra sin éxito alguno, finalmente mandaron a una moto de agua para que le recogiese y le trasladase a los pantanales del Puerto Deportivo.
Una vez en tierra firme el surfista se dirigió a su vehículo y en ese momento los policías portuarios le informaron de que iba a ser sancionado por el estacionamiento indebido y por bañarse en zona restringida.
El joven se negó a aportarles cualquier tipo de documentación y proporcionarles sus datos personales, siendo preciso llamar a la Policía Nacional para que procediera con este trámite.
Antes de la llegada de la Policía Nacional, el conductor se subió a la furgoneta y la arrancó con intención de iniciar la marcha. Uno de los policías portuarios se situó en el lateral delantero izquierdo del vehículo y puso las manos sobre el parabrisas ordenándole que no arrancara hasta que llegasen los agentes policiales, pero lejos de obedecer sus indicaciones inició la marcha apresuradamente y, según la nota de prensa, "el policía portuario se vio obligado a saltar para evitar ser atropellado" y pese a ello, "fue golpeado fuertemente en la pierna izquierda, sufriendo lesiones en el pie".
Después de la huida, y con la sabiendo la matrícula, Policía Judicial procedió a identificar al denunciado y detenerle como supuesto autor de un delito de atentado y de lesiones. El arrestado fue puesto en libertad tras ser prestársele declaración.
Y es que cuando las cosas se cruzan...
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