El surfista rescatado en Escocia: "No volveré a surfear jamás"
Matthew Bryce, el surfista escocés que pasó 32 horas a la deriva antes de ser rescatado por un helicóptero a más de 20 kilómetros de la costa, ha declarado en una entrevista a la BBC que no volverá a surfear nunca más.
El joven de 23 años, con las quemaduras del sol y del agua de mar todavía siendo evidentes en su cara, ha narrado a BBC Scotland el suceso que casi le cuesta la vida.
Todo comenzó como cualquier otro día, había conducido hasta la playa dónde dio cera a la tabla para ir a pillar sobre las 11 de la mañana unas olas. Pero pronto el día se convirtió en pesadilla cuando las mareas, muy fuertes en esa zona, y los vientos de tierra, se lo llevaron mar adentro. "El viento y las olas eran implacables", comentaba Bryce. En un momento ya estaba a una milla de la costa y la corriente no cambiaba. "Llegó un punto en el que remar no servía parar nada, pero seguía para mantenerme caliente".
Más tarde vio a varios barcos de pesca a lo lejos, pero sus señales de socorro nunca fueron contestadas y la noche fue cayendo. "Fue increíblemente solitario y tranquilo, no había nada, solo olas", decía Bryce. "No vi ningún helicóptero. Estaba convencido que iba a morir. No pensé en ver amanecer otra vez."
En ese momento vio las luces de algunos barcos a lo lejos por lo que decidió remar hacía alli con la esperanza de que pudieran verlo. Continuó remando durante toda la noche pero cuando amaneció las fuerzas empezaron a fallarle, cayendo de la tabla y comenzando a desmayarse. El día fue transcurriendo sin recibir ayuda y justo al atardecer, cuando ya no albergaba esperanzas, apareció un helicóptero a lo lejos. "Fue muy hermoso el verlo", dijo. Aterrorizado por no ser visto, saltó de su tabla y la usó para hacer señales. "Ver a esos chicos fue lo más bonito del mundo. Les debo la vida".
Matthew ha declarado que no volverá a surfear en la vida, y lo entiendo después de la experiencia que ha tenido.
Más información: Rescued surfer Matthew Bryce had 'prepared for death' (BBC)
El joven de 23 años, con las quemaduras del sol y del agua de mar todavía siendo evidentes en su cara, ha narrado a BBC Scotland el suceso que casi le cuesta la vida.
Todo comenzó como cualquier otro día, había conducido hasta la playa dónde dio cera a la tabla para ir a pillar sobre las 11 de la mañana unas olas. Pero pronto el día se convirtió en pesadilla cuando las mareas, muy fuertes en esa zona, y los vientos de tierra, se lo llevaron mar adentro. "El viento y las olas eran implacables", comentaba Bryce. En un momento ya estaba a una milla de la costa y la corriente no cambiaba. "Llegó un punto en el que remar no servía parar nada, pero seguía para mantenerme caliente".
Más tarde vio a varios barcos de pesca a lo lejos, pero sus señales de socorro nunca fueron contestadas y la noche fue cayendo. "Fue increíblemente solitario y tranquilo, no había nada, solo olas", decía Bryce. "No vi ningún helicóptero. Estaba convencido que iba a morir. No pensé en ver amanecer otra vez."
En ese momento vio las luces de algunos barcos a lo lejos por lo que decidió remar hacía alli con la esperanza de que pudieran verlo. Continuó remando durante toda la noche pero cuando amaneció las fuerzas empezaron a fallarle, cayendo de la tabla y comenzando a desmayarse. El día fue transcurriendo sin recibir ayuda y justo al atardecer, cuando ya no albergaba esperanzas, apareció un helicóptero a lo lejos. "Fue muy hermoso el verlo", dijo. Aterrorizado por no ser visto, saltó de su tabla y la usó para hacer señales. "Ver a esos chicos fue lo más bonito del mundo. Les debo la vida".
Matthew ha declarado que no volverá a surfear en la vida, y lo entiendo después de la experiencia que ha tenido.
Más información: Rescued surfer Matthew Bryce had 'prepared for death' (BBC)
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