Las consecuencias de una caida en Jaws
El surfista brasileño Carlos Burle nos muestra las consecuencias de caer en Peahi y se te enganche el invento de la tabla de surf en la pierna. Sucedió la semana pasada durante el Peahi Challenge.
Remó una gigantesca, el viento le tiró para atrás desequilibrándole y la ola no dejó aprovechar la oportunidad para tragarselo. El resto lo cuenta el propio Burle en Instagram.
"Fud... Ahora estoy de vuelta en la ola... ¡Respira, tranquilo y mantén en el cuerpo junto para proteger todos los miembros! Y... algo me tira de la pierna y me lleva con el. El invento es muy grueso y no esta hecho para que no se rompa... Gracias a Dios que se rompe, la tensión se va, y soy libre. Ahora llega un enorme dolor en la pierna izquierda. Pero es lo de menos... Estoy vivo y tengo ganas de volver a la superficie. Trato de controlar mis brazos... Es difícil debido a la confusión. Al final tengo que usar el flotador. Estoy en aguas muy profundas y dando tumbos. Finalmente consigo unir mis dos manos para tirar del chaleco extra y que me empuje hacia el aire que tanto necesito. Llevo mucho tiempo sumergido y espero no encontrarme otra ola cuando llegue a la superficie. Siento que estoy llegando. Me preparo para respirar. En medio de la respiración otra ola me coge y todo vuelve a empezar... fueron cuatro olas hasta que finalmente pude subir a la moto de agua y volver para mi manga".
Remó una gigantesca, el viento le tiró para atrás desequilibrándole y la ola no dejó aprovechar la oportunidad para tragarselo. El resto lo cuenta el propio Burle en Instagram.
"Fud... Ahora estoy de vuelta en la ola... ¡Respira, tranquilo y mantén en el cuerpo junto para proteger todos los miembros! Y... algo me tira de la pierna y me lleva con el. El invento es muy grueso y no esta hecho para que no se rompa... Gracias a Dios que se rompe, la tensión se va, y soy libre. Ahora llega un enorme dolor en la pierna izquierda. Pero es lo de menos... Estoy vivo y tengo ganas de volver a la superficie. Trato de controlar mis brazos... Es difícil debido a la confusión. Al final tengo que usar el flotador. Estoy en aguas muy profundas y dando tumbos. Finalmente consigo unir mis dos manos para tirar del chaleco extra y que me empuje hacia el aire que tanto necesito. Llevo mucho tiempo sumergido y espero no encontrarme otra ola cuando llegue a la superficie. Siento que estoy llegando. Me preparo para respirar. En medio de la respiración otra ola me coge y todo vuelve a empezar... fueron cuatro olas hasta que finalmente pude subir a la moto de agua y volver para mi manga".
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