Sobrevive 36 horas a la deriva sobre una tabla de surf
Una francesa de 24 años fue rescatada ayer martes después de pasar 36 horas a la deriva sobre su tabla de paddlesurf en la costa de Normandía, en el noroeste de Francia, según han informado varios medios.
La joven, de 24 años de edad e identificada como Clémence Lapeyre, fue encontrada muy débil y deshidratada por un barco belga, a unos 50 kilómetros de Le Havre, lugar desde donde había partido.
La guardia marítima, según los medios franceses, la evacuó por barco hasta el hospital de Fécamp, donde se constató que su vida no corre peligro.
Lapeyre se encontraba pasando unos días de vacaciones con unos familiares en la localidad costera de Morsalines y aprovechó la visibilidad que ofrecía la llegada de la superluna para hacer una excursión nocturna en «paddleboard».
La voz de alarma fue dada por sus familiares el lunes a mediodía, cuando se dieron cuenta de que no había vuelto a casa y no había dado ningún aviso.
Las autoridades costeras pusieron en marcha entonces un dispositivo aéreo y marítimo para localizarla en las aguas del Atlántico, donde según los medios había un fuerte oleaje.
Un tío suyo relató hoy a la cadena BFM TV que la joven se esforzó por mantenerse consciente y llegó a caerse tres veces de la tabla a lo largo de las 36 horas que pasó desaparecida.
La joven, de 24 años de edad e identificada como Clémence Lapeyre, fue encontrada muy débil y deshidratada por un barco belga, a unos 50 kilómetros de Le Havre, lugar desde donde había partido.
La guardia marítima, según los medios franceses, la evacuó por barco hasta el hospital de Fécamp, donde se constató que su vida no corre peligro.
Lapeyre se encontraba pasando unos días de vacaciones con unos familiares en la localidad costera de Morsalines y aprovechó la visibilidad que ofrecía la llegada de la superluna para hacer una excursión nocturna en «paddleboard».
La voz de alarma fue dada por sus familiares el lunes a mediodía, cuando se dieron cuenta de que no había vuelto a casa y no había dado ningún aviso.
Las autoridades costeras pusieron en marcha entonces un dispositivo aéreo y marítimo para localizarla en las aguas del Atlántico, donde según los medios había un fuerte oleaje.
Un tío suyo relató hoy a la cadena BFM TV que la joven se esforzó por mantenerse consciente y llegó a caerse tres veces de la tabla a lo largo de las 36 horas que pasó desaparecida.
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